jueves, 18 de mayo de 2017

Seguridad social: tercera edad y pensiones


 Las protestas se multiplican y se extienden a diversos sectores y en los cuatro puntos cardinales de la geografía, ya van por su sexta semana y en esta ocasión convocaron a las personas de la tercera edad. Sobre este sector importa hacer algunas consideraciones sobre las pensiones de jubilación, así como la seguridad social en general.
 
En Venezuela, para 1998 el sistema de seguridad social no había cedido a las políticas privatistas que se impusieron en casi toda América Latina, seguía predominando el clásico sistema de reparto. Sin embargo el nuevo régimen al llegar al poder detuvo una reciente reforma aprobada en 1998 en el gobierno precedente de Rafael Caldera, que si bien no tenía una marcada influencia neoliberal si sugería la capitalización individual como por vía optativa, pero lo más importante era que apuntaba a hacer una reestructuración y a actualizar una seguridad social que para entonces presentaba notables limitaciones.

  El Instituto Venezolano de los Seguros Sociales era un ente inauditable, sobre el cual había poca confianza en el buen uso de los recursos aportados por empresas y trabajadores, y que para hacer más transparente su desenvolvimiento era necesario separar la actividad prestadora de salud, de aquella eminentemente financiera, pero ambas seguirían en manos estatales. Este primer paso fue paralizado por el Presidente Chávez al llegar al poder.

  La proporción de trabajadores que contribuye a la seguridad social, sigue siendo de sólo un 35%, lo cual guarda relación, con la tasa de desocupación y el peso de la economía informal. No es Venezuela de los países con los más altos porcentajes de cobertura en América Latina, como si son Chile, Costa Rica, Uruguay, Argentina y Brasil.

  La pensión de vejez se paga con el mismo monto del salario mínimo, cualquiera haya sido el aporte de las cotizaciones del trabajador. Una ley aprobada antes de la revolución bolivariana propuesta por la Causa R así lo establecía, además la nueva constitución aprobada en 1999 lo incorpora, la prestación se concibe como universal sin importar la afiliación al sistema.

  Para tener una idea clara de lo que representa una pensión de sólo el salario mínimo, en los años 2016-17 se necesitan entre 17 y 19 salarios mínimos para adquirir la cesta  alimentaria para una familia de 5 personas, según el monitoreo de precios y costo de vida de Cendas-FVM.

  En Venezuela en los últimos años el gobierno en el manejo unilateral y exclusivo de la política salarial ha tendido a priorizar el incremento de bonos antes que de los salarios, los primeros no tienen incidencia en las prestaciones y otros importantes beneficios. Esta tendencia plantea un doble efecto negativo a la seguridad social, resulta que por no ser salarios las contribuciones de la mayor parte de los ingresos de los trabajadores que ingresan a la caja del IVSS, ahí no se toma en cuenta los bonos, y para peor al trabajador jubilarse, ya no percibirá  estos bonos.

 Predomina en el mundo la extension progresiva de la edad para jubilarse, en Venezuela es de 55 años para la mujer y 60 para los hombres, esta cobertura se mantiene con edades que están entre las más bajas en el mundo. En los países donde se aprueba la extension de la edad es una respuesta a la crisis financiera de los sistemas de seguridad social, y al mismo tiempo evitando subir las cotizaciones, y que por lo demás la expectativa de vida ha venido subiendo, lo que en alguna manera concilia con la medida.

  En Venezuela los recursos para agregar más personas a percibir la pensión de vejez, que para el año 2017 alcanza alrededor de los tres millones de personas, consumen más allá de los recursos de los aportes de empresas y trabajadores, los que se estiman no llegar al 20% de las necesidades de pago del IVSS tanto en su funcionamiento como en las pensiones. La mayor parte de los ingresos con los cuales se sostiene este organismo así como el pago de las pensiones provienen de un impuesto regresivo como es el IVA, en menor medida de los ingresos de impuesto sobre la renta, y todos los años se recurre a créditos adicionales para subsanar deficiencias.

  Venezuela atiende con pensión contributiva y no contributiva un 40% del porcentaje de la población de adultos mayores para el 2010, es casi el promedio de América Latina -41%-.
“Las pensiones no contributivas aumentan, porque existen recursos para pagarlas y se descubre la tercera edad como un grupo electoral importante, que se debate entre la gracia y el derecho. Para evitar lo primero, la CEPAL, las contempla como un derecho de ciudadanía, hasta la formulación del piso de protección social.”, lo señala el experto Luis Díaz, de LUZ, en “Derecho a Mínimos Sociales”. Agrega que el esfuerzo por incluir es a quienes no tienen capacidad contributiva, los que menos seguridad social tienen, debido a que el costo de la formalidad es alto; o no tienen la oportunidad de conocer los beneficios, por razones de distancia o por ignorar los modos de ingreso; o porque la supervisión del trabajo no es suficiente. Las prestaciones no contributivas, son útiles para afiliar a ciudadanos, - ajenos a la realidad del mercado formal de trabajo-, en organismos paralelos de la seguridad social.

 Esta entendido que las pensiones no contributivas son las que más se han agregado al listado de pensionados. Diversos programas se han puesto en práctica para este propósito. Todas las decisiones que dan lugar a incorporar mas beneficiarios a la recepción de pensiones no contributivas tienen un sesgo electoral y proselitista, por la manera como se establecen los criterios de elegibilidad sin arbitraje y como son administradas, porque el margen de discrecionalidad es muy amplio y el poder de escrutinio, muy bajo. Todo se desarrolla por entidades que no son auditadas imparcialmente.

lunes, 8 de mayo de 2017

Ola de saqueos en Carabobo: desorden social como efecto del desgobierno


Cuatro días continuos de saqueos en seis de los municipios del Estado Carabobo dejan saldo de más de cien establecimientos saqueados. Esos cuatro días empezaron el martes 2, y continuaron miércoles, jueves y viernes. En algunos casos ocurrían en el día, y también en otros en la noche. En este lapso no hubo gobierno; policías y guardias nacionales no aparecían en las zonas de los sucesos, y si lo hacían pasaban de largo. En redes sociales se ha podido ver varios videos donde policías en uniforme y en equipos de transporte oficiales participan de los saqueos (http://www.el-nacional.com/noticias/sucesos/asi-fueron-los-saqueos-carabobo-este-martes_180296); (Noticias Venezuela en Twitter_ _#4Mayo ¡Mira quien saquea! #Carabobo https___t.co_PlOi7DW8en_.htm); (https://www.youtube.com/watch?v=z75cs8jqcZI).

  Apenas recién fue al final del cuarto día de saqueos que aparecieron autoridades patrullando y tomando algunas acciones. Se concluye que los asaltos fueron realizados sin limites de ningún tipo, tan sólo algunos comerciantes que tomaron acciones directas, por ello está detenido un comerciante de origen chino, a quién se le acusa de un asesinato en la defensa de su propiedad.

  Cuando esta ola de saqueos parece haber concluido, aparece el gobierno central por intermedio del Ministro de Relaciones Interiores, Justicia y Paz, informando el día 6 de mayo, de 135 establecimientos saqueados y de 45 bandas criminales identificadas . Agrega que “ los detenidos serán presentados a la jurisdicción penal militar, donde tribunales de su jurisdicción se encargarán de continuar con las investigaciones”. Llama la atención que a la Fiscalía, vía natural para estas investigaciones se le excluye.

  Es deplorable la tardía reacción gubernamental no obstante que vista la aguda escasez de alimentos y de otros rubros sensibles, el país ha estado en el alto riesgo de saqueos, y de hecho se han venido presentado de manera sistemática en las principales ciudades del país, pero no se había tenido una oleada de la magnitud de la de Carabobo. El año pasado hubo saqueos en Cumaná y en Ciudad Bolívar, pero todo ocurrió en no más de dos días. El país cada vez produce menos, este 2017 sería el cuarto año consecutivo decreciendo. El parque industrial de Carabobo es hoy un cementerio de galpones vacíos, de ciudad industrial de Venezuela ha pasado en estos días a la ciudad de los saqueos.

   Mientras ocurrían los saqueos en varios sitios de la ciudad hubo las diarias protestas convocadas por la oposición, en donde los jóvenes asumen altos riesgos, la represión policial y militar es excesiva y desproporcionada, ya que las exigencias de la protesta están enmarcadas en la constitución nacional, como es solicitar un cronograma electoral, la apertura de la ayuda humanitaria por la escasez de bienes esenciales, la amnistía y la liberación de los presos políticos condenados por juicios amañados y violando el debido proceso, el desarme de grupos de paramilitares y el restablecimiento del balance de los poderes públicos, particularmente el pleno ejercicio de las funciones de la Asamblea Nacional.

  Los gremios empresariales locales reportan más de cien establecimientos saqueados. Los invasores tomaron la mercancía, y por supuesto con destrozos de muebles e instalaciones, y no pocos casos que tomaban más allá de la mercancía en venta, como desintalar y llevarse los aires acondicionados, equipos y herramientas de trabajo. Los primeros saqueos se dirigieron a ventas de alimentos, pero luego se extendió otros establecimientos que expenden productos de otros ramos.  Ademas de comercios, también se incluyen invasiones y saqueos a industrias, tal es el caso de una fábrica de embutidos y otra de pastas. Otros saqueos que han venido ocurriendo es de los camiones que transportan alimentos, los mas frecuentes, pero también de otros productos. En estos días se recrudecieron los asaltos.

  La población nerviosamente abarrota los locales comerciales para compra de alimentos y otros productos esenciales. Los comerciantes reaccionan con miedo, algunos apenas abren parte de sus puertas y controlan el ingresos. Otros no abren. Parte de la cadena de suministros se ha interrumpido.

  En los sectores residenciales temen que los saqueos se re orienten a sus casas. Algunos pocos casos han ocurrido, y su divulgación por redes sociales ha multiplicado las medidas preventivas.

  Las protestas empezaron hace 33 días, y aún nada indica que dejarán de mantenerse, más bien por el contrario cada respuesta del gobierno las enardece. De las recientes:

El retiro de la Organización de Estados Americanos sin tener presente los procedimientos que han de seguirse "Nuestra Constitución establece que todos los acuerdos internacionales relacionados con derechos humanos son parte de la Constitución, por tanto ni que el Parlamento ni que el Ejecutivo quisiera salirse de cualquiera de estos acuerdo pudiera hacerlo, porque una vez que el Estado venezolano ha suscrito acuerdos que protege derechos humanos ya es parte sustancial de nuestra Constitución..”, declaraciones del Presidente de la Asamblea Nacional.
 La propuesta por parte del Gobierno de una convocatoria a una Asamblea Constituyente que pretende excluir la votación directa del ciudadano para elegir a los constituyentistas.

  Pero lo real y auténtico es que no hay medidas que hayan contrarrestado el desplome de los niveles de consumo, que han sido constantes en estos últimos cuatro años, desde el 2013 a hoy.